.
Esta gran obra épica sánscrita (La Historia del Señor Rama) es muy antigua. De acuerdo con la tradición, se remonta a tetra yuga, alrededor de dos millones de años atrás. El sabio Valmiki fue el primero que recopiló la historia en forma escrita. Su versión, conocida con el nombre de Ramayana (“La senda de Rama”) es considerada una de las 2 más importantes historias épicas de la historia de la India (la otra es el Mahabharata). También cuenta con la distinción de ser llamado el primer poema (adikavya) dentro de la totalidad de la literatura sánscrita.
La extensión del Ramayana es tan considerable como lo es su antigüedad: el poema se compone de 24.000 versos (48.000 lineas) y por lo tanto eclipsa a La Ilíada y La Odisea las cuales tienen 15.693 y 12.000 líneas respectivamente. El Mahabharata, contiene alrededor de 200.000 líneas, pero, el Ramayana es mejor conocido por su delicada belleza: belleza en términos de poesía en sánscrito, de la descripción vívida y la profundidad de sus diálogos, belleza en término de los valores morales y éticos que evoca. Belleza en términos de dharma (la importancia de ejecutar los deberes de la persona). Belleza en términos de emociones colocadas en primer lugar, y quizás, más que nada, belleza en términos de los caracteres que describe. El principal entre todos esos caracteres es el propio Señor Rama. Se lo describe claramente como un avatara (Dios en la tierra). Rama es alto, fuerte y virtuoso. El es la encarnación de la virtud, un verdadero héroe, que no teme mostrar Su lado más “humano”: amar y sentir dolor en separación cuando la mujer que se encuentra tan cerca de Su corazón es llevada lejos de El. Sita, la mujer en cuestión, es también virtuosa. Ella es el paradigma de la castidad y de todo aquello que es bueno y verdadero. Laksman, el noble hermano de Rama, sirve a la pareja divina sin una traza de egoísmo, en todas las necesidades. Finalmente Hanuman, el más inusual de los caracteres del Ramayana (es mitad hombre, mitad mono) es el auténtico emblema de la fortaleza, de la hidalguía, la lealtad y la devoción.
La extensión del Ramayana es tan considerable como lo es su antigüedad: el poema se compone de 24.000 versos (48.000 lineas) y por lo tanto eclipsa a La Ilíada y La Odisea las cuales tienen 15.693 y 12.000 líneas respectivamente. El Mahabharata, contiene alrededor de 200.000 líneas, pero, el Ramayana es mejor conocido por su delicada belleza: belleza en términos de poesía en sánscrito, de la descripción vívida y la profundidad de sus diálogos, belleza en término de los valores morales y éticos que evoca. Belleza en términos de dharma (la importancia de ejecutar los deberes de la persona). Belleza en términos de emociones colocadas en primer lugar, y quizás, más que nada, belleza en términos de los caracteres que describe. El principal entre todos esos caracteres es el propio Señor Rama. Se lo describe claramente como un avatara (Dios en la tierra). Rama es alto, fuerte y virtuoso. El es la encarnación de la virtud, un verdadero héroe, que no teme mostrar Su lado más “humano”: amar y sentir dolor en separación cuando la mujer que se encuentra tan cerca de Su corazón es llevada lejos de El. Sita, la mujer en cuestión, es también virtuosa. Ella es el paradigma de la castidad y de todo aquello que es bueno y verdadero. Laksman, el noble hermano de Rama, sirve a la pareja divina sin una traza de egoísmo, en todas las necesidades. Finalmente Hanuman, el más inusual de los caracteres del Ramayana (es mitad hombre, mitad mono) es el auténtico emblema de la fortaleza, de la hidalguía, la lealtad y la devoción.
El primer libro del Ramayana de Valmiki (Bala-Khanda) relata el divino nacimiento de Rama, su niñez y su casamiento con Sita. En el segundo libro (Ayodya-Khanda) Valmiki narra la preparación para la coronación de Rama y la intriga que conduce al exilio de Rama en el bosque. El tercer libro (Aranya-Khanda), describe la vida de Rama en el bosque acompañado de Sita y Laksman, las personalidades que ellos conocen y el rapto de Sita. En el cuarto libro (Krishkindha-khanda) Rama se encuentra con Hanuman y Sugriva y forja una profunda alianza con ellos y corona a Sugriva como rey de Krsishkindha. Mientras tanto, Valin, el hermano mayor de Sugriva es asesinado y la misión de encontrar a Sita permanece inconclusa. El quinto libro, (Sundara – khanda) se centra en la personalidad y el lila de Hanuman que se las ingenia para encontrar a Sita y entregarle un mensaje del Señor Rama junto con un anillo de Su pertenencia, como evidencia de Su alianza. En el sexto libro (yuddha – khand), tiene lugar la largamente esperada batalla entre el ejército del Señor Rama y las huestes del demonio Ravana. El Señor Rama sale victorioso y establece el Rama – Rajya. El séptimo libro (uttara – khanda) es el más controversial de todos. Sita devi tiene a los dos hijos de Rama: Kusha y Lava en la hermita de Valmiki, a la cual Ella había sido desterrada por Rama, después de que oyera rumores de infidelidad. Con el tiempo, Kusha y Lava son colocados en el trono de Ayodya. Pero Sita, quebrando Su destierro, se funde con la tierra y el Señor Rama lleno de remordimientos parte hacia Su morada celestial.
Las grandes sagas épicas de la India, han sido a menudo comparadas con las épicas clásicas griegas, en términos de extensión y estilo. También comparten ciertos temas subyacentes: Rama venció al poderoso villano Ravana y rescató a Su amada esposa Sita, de la misma manera en que Menelao destruyó la ciudad de Troya y rescató a su esposa Helena (1).
La tradición comentarial e interpretativa de la tragedia griega y de la saga épica sánscrita, a menudo buscó resolver problemas de la misma forma. Por ejemplo, el poeta Estesicoro dice que en realidad Helena nunca fue a Troya con el príncipe Paris. La Helena de Troya fue una aparición sustituta, mientras que la Helena real, esperaba esperanzada en Egipto por su amado Menelao (2). Los devotos de Sri Rama explicamos la abducción de Sita de la misma manera. La Sita en poder de Ravana era una sustitución, una “sombra” (chaya), una Sita “ilusoria” (Maya); La Sita real jamás podría haber sido ni siquiera tocada por un demonio como Ravana. Ella esperó por Rama en un estado inmanifiesto. Este tipo de similaridades entre ambos textos, ha ha empujado a los eruditos a investigar la influencia de ejercida por las antiguas sagas épicas de la India sobre la cultura occidental.
Las grandes sagas épicas de la India, han sido a menudo comparadas con las épicas clásicas griegas, en términos de extensión y estilo. También comparten ciertos temas subyacentes: Rama venció al poderoso villano Ravana y rescató a Su amada esposa Sita, de la misma manera en que Menelao destruyó la ciudad de Troya y rescató a su esposa Helena (1).
La tradición comentarial e interpretativa de la tragedia griega y de la saga épica sánscrita, a menudo buscó resolver problemas de la misma forma. Por ejemplo, el poeta Estesicoro dice que en realidad Helena nunca fue a Troya con el príncipe Paris. La Helena de Troya fue una aparición sustituta, mientras que la Helena real, esperaba esperanzada en Egipto por su amado Menelao (2). Los devotos de Sri Rama explicamos la abducción de Sita de la misma manera. La Sita en poder de Ravana era una sustitución, una “sombra” (chaya), una Sita “ilusoria” (Maya); La Sita real jamás podría haber sido ni siquiera tocada por un demonio como Ravana. Ella esperó por Rama en un estado inmanifiesto. Este tipo de similaridades entre ambos textos, ha ha empujado a los eruditos a investigar la influencia de ejercida por las antiguas sagas épicas de la India sobre la cultura occidental.
(1) W. L. Smith, 1988 “Ramayana traditions in Eastern India”. Assam, Bengal, Orissa, 92. University of Stockholm.-
(2) C. Kirk “The Nature of the Greek Myths” 94. Citado en W. L. Smith. –
Estecicoro: Nombre de varios poetas griegos. Uno de los cuales nació en Himera (Siciclia) entre 640 y 555 A.C. a quien a algunos escritores antiguos han comparado con Homero (nota del traductor).-
Extraído del capítulo The Vedic Literature, del libro The Hidden Glory of India. Escrito por Steven J. Rossen (Satyaraja dasa)
Traducido al español por Dhira Gauranga dasa.
(2) C. Kirk “The Nature of the Greek Myths” 94. Citado en W. L. Smith. –
Estecicoro: Nombre de varios poetas griegos. Uno de los cuales nació en Himera (Siciclia) entre 640 y 555 A.C. a quien a algunos escritores antiguos han comparado con Homero (nota del traductor).-
Extraído del capítulo The Vedic Literature, del libro The Hidden Glory of India. Escrito por Steven J. Rossen (Satyaraja dasa)
Traducido al español por Dhira Gauranga dasa.
.
Enviado por el grupo Amigos de Krsna - Argentina
Enviado por el grupo Amigos de Krsna - Argentina
.
NOTA del STAFF ISKCON Peru: Puede accesar a nuestro link de videos en:
.
http://harekrishna-iskcon.blogspot.com/2007/03/ramayana-pt-1.html
No comments:
Post a Comment